La tensión comercial entre China y Estados Unidos no ha hecho más que intensificarse en los últimos tiempos. El año pasado presenciamos en directo como Washington impulsaba controles de exportación sobre hardware de vanguardia en materia de inteligencia artificial (IA), mientras que Pekín hacía lo propio con materiales críticos como el galio, el germanio y el antimonio.
Copia y pega esta URL en tu sitio WordPress para incrustarlo
Copia y pega este código en tu sitio para incrustarlo