Bolivia cree que el incidente ocurrido el viernes por diplomáticos españoles en la residencia del embajador mexicano en La Paz ocurrió para remover a un ministro del ex refugio Evo Morales, una suposición «categóricamente» negada por Madrid el sábado. (28)
El día anterior, los diplomáticos españoles intentaron entrar con personas «encapuchadas» en la sede diplomática, donde se encuentran varios miembros del antiguo gobierno, pero la policía que los vigilaba les impidió entrar, dijo el viernes la ministra de Asuntos Exteriores boliviana, Karen Longaric.
El ministro del Interior de Bolivia, Arturo Murillo, dijo el sábado que los españoles habían intentado evacuar en secreto al ex ministro presidencial Juan Ramón Quintana, contra quien el tribunal del país emitió una orden de arresto por los delitos de sedición y terrorismo
“Temíamos que lo que iban a hacer fuera eliminar a un criminal común como Juan Ramón Quintana; esto fue abortado», dijo Murillo. El ex ministro Quintana ha sido uno de los colaboradores más cercanos de Morales desde que llegó al poder en 2006.
La residencia de la embajadora María Teresa Mercado se encuentra en el centro de una disputa entre el gobierno interino de Bolivia y México luego de que recibió a nueve o diez colaboradores de Morales allí después de la renuncia del ex presidente el 10 de noviembre. protestas violentas de la oposición por fraude electoral.
Los videos caseros publicados en las redes sociales muestran al menos dos vehículos de la embajada española y personas con el rostro cubierto. Los policías bolivianos los interceptan, mientras los vecinos gritan lo que está sucediendo.
Los periódicos españoles El País y El Mundo informaron el sábado que los encapuchados eran guardias de seguridad de la embajada española, miembros del Grupo de Operaciones Especiales, una unidad policial de élite, pero el Ministerio de Relaciones Exteriores no confirmó la información.
El incidente, cuando la mujer de negocios española Cristina Borreguero y el cónsul, Álvaro Fernández, visitaban la sede diplomática mexicana en La Paz, podría agravar las relaciones ya tensas entre México y Bolivia y también salpicar a España.
En Madrid, la cancillería española negó «categóricamente» que se haya intentado «facilitar la evacuación» de los funcionarios de Evo Morales y se aseguró de que, en cualquier caso, fuera una visita «puramente de cortesía».
Redacción Curadas.
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