El FBI detuvo este jueves a Ghislaine Maxwell, la británica presuntamente implicada en el tráfico de menores que llevaba a cabo el multimillonario Jeffrey Epstein.
Desde príncipes hasta políticos de alto rango se han visto salpicados por las actividades de Epstein. Pero el nombre que más ha sonado es el de su exnovia.
Una de las mujeres que se declaró víctima señaló a BBC que Maxwell controlaba a las mujeres que estaban al servicio del multimillonario. «Ghislaine controlaba a las chicas. Era como la madame», dijo Sarah Ransome.
«Ella era como de los elementos básicos de la operación de tráfico sexual y siempre visitaba a Jeffrey en la isla para asegurarse de que las chicas estuvieran haciendo lo que se suponía que debían estar haciendo», declaró.
La mujer nació el 25 de diciembre de 1961 en las afueras de París. Fue educada en la Universidad de Oxford y habla varios idiomas.
«Medios estadounidenses señalan que desde joven fue una persona con numerosos contactos en la clase alta y que fue ella quien le presentó a Epstein a muchos de sus amigos ricos y poderosos. Entre ellos, el expresidente de Estados Unidos Bill Clinton y el príncipe Andrés, duque de York», escribe BBC.
En múltiples Maxwell ha negado su vinculación con los abusos de los que acusaron a Jeffrey Epstein. Estos se hicieron públicos por primera vez en el año 2009.
Víctimas vinculan a Ghislaine Maxwell
Virginia Giuffre, una presunta víctima del multimillonario, que Maxwell la reclutó cuando tenía 15 años como «masajista» para el financiero. Maxwell tildó entonces a Giuffre de mentirosa y la joven le interpuso una demanda por difamación que las partes resolvieron antes de llegar a juicio en 2017.
Maxwell es hija del magnate de los medios británicos Robert Maxwell. Estuvo a cargo de su club de fútbol, el Oxford United, y el hombre nombró a su yate Lady Ghislaine en su honor.