El peor remedio: la indignación por restricción de compras por número de cédula

La medida impuesta por el gobernador de Miranda, Héctor Rodríguez, de restringir las compras de bienes esenciales por el terminal del número de la cédula de identidad, ha causado indignación entre los usuarios y dirigentes políticos.

Ante esta decisión, el refrán popular: «es peor el remedio que la enfermedad», se aplica claramente, porque, a juicio de los dirigentes, la medida no frenará la expansión de la COVID-19, sino que afectará la ya mermada calidad de vida de los habitantes de Miranda.

“La medida de compras de alimentos por terminal de número de cédula no responde a ningún criterio técnico o médico, en función de frenar el contagio de COVID-19 en Venezuela”, aseveró el diputado de la Asamblea Nacional Freddy Valera.

“Para la inmensa mayoría de las familias venezolana es imposible contar con los recursos necesarios para abastecerse de insumos de primera necesidad para una semana. Por otro lado, nuestros mercados no tienen la capacidad real, por lo que nuestra gente debe hacer varios recorridos en diferentes días para conseguir sus productos”, apuntó.

“Esta medida es violatoria del derecho a la alimentación de nuestros ciudadanos, y no responde a una política seria de Estado, y por eso llamó a la conciencia de la administración de Nicolás Maduro para que evite poner a la población en estado de angustia”, insistió.

En el mismo sentido se expresó el director de Datanálisis, José Antonio Gil Yepes, quien argumentó que si bien la medida parece ser «de simple distanciamiento, desafortunadamente tiene consecuencias sobre los consumidores, porque la mayoría vive día a día. Si te toca comprar dos veces por semana, te descontrola esa rutina. Lo peor es que esto le añada problemas al venezolano, a nivel económico y de salud, frente a la pandemia».