Llegó Ronald Koeman, el francotirador holandés que reventó redes a decenas, especialmente la de Wembley. Y lo hizo contundente, como le pegaba a portería, con un mensaje general («sólo quiero jugadores que quieran estar aquí») y uno muy concreto y sincero para Messi. «No sé si tengo que convencer a Messi. No sé si es sí o no. Messi es el mejor jugador del mundo y lo quieres tener en tu equipo, no en el contrario. Por mi parte, como entrenador, me encanta trabajar con Messi. Porque te gana partidos. Y si le sacas el rendimiento que ha demostrado, contentísimo si quiere quedarse. Pero es jugador del Barça y tiene contrato. Hay que hablar con él, claro, es el capitán. Hay que tomar decisiones pero ojalá que Messi siga más años aquí».
Sobre el contacto Koeman-Messi, pues, giró la presentación del holandés. Una reunión que se producirá de manera inminente. «Si digo qué le voy a decir a Messi, no hace falta reunirme con él. Son cosas privadas entre un jugador y el entrenador. Quiero saber qué piensa del Barça, qué piensa de cómo quiere seguir. Y luego soy yo el que tiene que tomar decisiones. Pero, una vez más, Messi tiene un año de contrato. Pero es un jugador tan importante que lo quiere cualquier equipo». Sobre el aire quedaron, pues, las líneas maestras de Koeman, que amagó con coger el bastón de mando en el vestuario que hasta ahora han tenido Messi y los jugadores.
Sobre su filosofía no aclaró demasiado. Sólo redundó en los lazos entre el Barça y Holanda: «Soy holandés y a los holandeses les gusta tener el balón. Mi es tener el balón, dominar, jugar bien al fútbol y ganar. Llevo bastantes años como entrenador, he aprendido de bastantes entrenadores como jugador, tengo experiencia en muchos equipos como entrenador y creo que estoy capacitado». Rehusó hablar de fichajes, aunque alabó a Van de Beek y se despidió con un mensaje más. «Como todos los culés, me sentí muy triste. La imagen no es la imagen que queremos. Fue un día triste. Pero será diferente». Koeman no se va a quedar quieto en el Barça.
vía AS