Estados Unidos analiza fórmulas para detener el envío regular de combustibles a Cuba, según señaló la subsecretaria de Estado adjunta para Cuba y Venezuela, Carrie Filipetti.
La funcionaria recordó que la Asamblea Nacional aprobó una ley que prohíbe estos envíos, por lo que, como la única autoridad legítima que reconoce Estados Unidos y otro medio centenar de naciones, avala cualquier medida que se adopte para impedir que la gasolina, dramáticamente escasa en Venezuela, siga fluyendo a la nación antillana.
La diplomática sostiene que Maduro prefiere seguir «pagando a sus titiriteros» en lugar de atender las necesidades de los venezolanos.
Filipetti dijo que Cuba financia «su ocupación en Venezuela» con el dinero proveniente de sus exportaciones de ron, tabaco, y del turismo, actividades que fueron sancionadas por el Departamento del Tesoro este miércoles 23 de septiembre.
El gobierno de Estados Unidos espera que la ONU le de un mandato a la Comisión de Investigación para que continúe indagando sobre presuntas violaciones de Derechos Humanos en Venezuela.
Filipetti destacó que esta información es muy importante para que la Unión Europea pueda sancionar a más funcionarios del ejecutivo chavista, y se profundice la lucha por una transición democrática creíble.
La subsecretaria adjunta insistió en resaltar la gravedad del reciente informe de la comisión de la ONU y acusó directamente al mandatario Nicolás Maduro de ser directamente responsable por violaciones sistemáticas de los Derechos Humanos.
Con información de Banca y Negocios