Comienza otra semana y con ella el miedo a tener que usar el metro
Escucha el audio o sigue leyendo
Como si no fueran suficientes los empujones, los carteristas, los malos olores, los pedigüeños, los atracos, las arrecostadas, los arrollamientos, los retrasos, los apretones, el calor, y cuanto martirio se sufre dentro de los vagones, ahora hay que sumar la ausencia casi absoluta de normas de bioseguridad en el metro de Caracas.
El periodista Pedro Beomon, usuario frecuente del metro, denuncia con preocupación la manera en que se relajaron las medidas de bioseguridad que se establecieron para contener la propagación del coronavirus entre los usuarios de este importante medio de transporte.
Al inicio de la cuarentena los accesos estaban limitados y restringidos, y se vigilaba el cumplimiento del distanciamiento social.
En el metro parece que no hay pandemia
Ahora, estando lejos de vencer los estragos de la pandemia, de manera alarmante y fuera de toda lógica y sentido, se suavizaron las normas, por decir lo menos, a tal punto que parece que dentro del metro no hay pandemia.
El metro puede usarse como diagnóstico de la sociedad en la cual vivimosPedro Beomon
Llamado a las autoridades
Las autoridades responsables del mejor uso del metro tienen que velar por el cumplimiento de las medidas de bioseguridad.
Algo tan básico como el distanciamiento social no se está cumpliendo.
Cuidémonos nosotros mismos
Sin excusar ni suavizar la responsabilidad que tienen las autoridades sobre el resguardo de las medidas de bioseguridad en el metro, esta relajación inexplicable y sin duda alarmante, obliga a los usuarios a cuidarse más.
Además de usar tapabocas, guardar suficiente distancia, lavarnos las manos apenas podamos, y si es factible, llevar dispensador de alcohol, también es muy conveniente y de probada efectividad, hablar lo menos posible.
El metro requiere el cumplimiento de las medidas de bioseguridad porque por su naturaleza facilita las aglomeraciones, y en nuestro caso, hasta el hacinamiento.
Además de ser un lugar idóneo para la propagación del virus dentro de los vagones, distribuye a los posibles contagiados por toda la ciudad.
¡Dios nos agarre confesados!
Foto: CNN
La ignorancia y la decidia serán las responsables de más infestación y muertes en un país en crisis humanitaria. Una verdadera bomba de tiempo y más flexibilización!!!! Diis mío!
Lo que allí pasa es que la guardia y policías no pueden matarquear …por eso no les interesa a los comandantes enviar sus escuadrones a vigilar las entradas del metro porque allí no hay ganancias
Dios nos proteja porque los aprendizajes de aciertos y errores en otros países que ya están teniendo la segunda ola indican que lo único cierto que hay son las medidas de bioseguridad para controlar el covid. Por lo tanto todo depende de la responsabilidad o irresponsabilidad individual , colectiva y de las autoridades. A ponernos serios!!!!