El G20 no logró este fin de semana alcanzar un acuerdo para intentar limitar el calentamiento global a 1,5 grados. El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, advirtió que sin el liderazgo de este grupo no será posible lograr el objetivo.
En tal sentido, Guterres exigió a los países del G20 más ambición en la lucha contra el cambio climático, reportó el servicio de noticias de la ONU.
«El mundo necesita urgentemente un compromiso claro e inequívoco con el objetivo de 1,5 grados del Acuerdo de París por parte de todas las naciones del G20», dijo Guterres después de que el grupo de las naciones más industrializadas no lograra un acuerdo en este sentido durante una reunión ministerial sobre Medio Ambiente, Clima y Energía realizada en Nápoles, Italia, del 23 al 25 de julio.
Los ministros del G20 no pudieron llegar a un acuerdo sobre la eliminación del carbón y el objetivo de 1,5 grados. Los puntos tendrán que discutirse en la cumbre del G20 que se celebrará en Roma en octubre, justo un día antes de que comience la COP 26.
«No hay camino hacia este objetivo sin el liderazgo del G20», insistió el secretario general en un comunicado.
El responsable de la ONU recordó que para lograr «objetivo ambicioso, pero alcanzable», el mundo debe lograr la neutralidad del carbono antes de 2050 y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 45 % de aquí a 2030 respecto a los niveles de 2010. «Pero estamos muy desviados de ese camino», advirtió.
Un revés para la COP-26
A menos de 100 días de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Clima, COP 26, una reunión fundamental que se celebrará en Glasgow a finales de octubre, Guterres instó a todos los líderes del G20 y de otros países a presentar planes climáticos nacionales más ambiciosos y a poner en marcha políticas y acciones concretas.
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Entre ellas, no utilizar más carbón después de 2021, eliminar progresivamente las subvenciones a los combustibles fósiles y acordar un precio mínimo internacional del carbono, tal y como propone el Fondo Monetario Internacional (FMI).
«El G7 y otros países desarrollados también deben cumplir con un paquete de solidaridad creíble de apoyo a los países en desarrollo”, dijo.
Esto incluye el cumplimiento del objetivo de 100.000 millones de dólares, el aumento de la adaptación y el apoyo a la resiliencia a por lo menos el 50% de la financiación total del clima.
También, conseguir que los bancos de desarrollo públicos y multilaterales alineen significativamente sus carteras climáticas para satisfacer las necesidades de los países en desarrollo, destacó Guterres.
El secretario general dijo que tiene la intención de aprovechar la oportunidad de la próxima sesión de alto nivel de la Asamblea General de la ONU para reunir a los líderes y llegar a un entendimiento sobre estos elementos críticos del «paquete» necesario para Glasgow.