La revolución del Newcastle va cogiendo fuerza a medida que pasan los días. Desde que se confirmó la compra del club por parte del fondo saudí PIF, controlado por el príncipe heredero Mohammed bin Salman, junto a PCP Capital Partners y RB Sports&Media, las consecuencias han sido inmediatas desde todos los estamentos. Equipos de la Premier League, futbolistas, entrenadores… todos forman parte de una burbuja en la que el Newcastle quiere sacar tajada gracias a su nueva inyección económica.
Planes de fichajes
El plano deportivo ha sido el primero en acaparar los focos de la rumorología, pues es evidente que el Newcastle ahora podrá aspirar a cotas mayores. En el banquillo, Steve Bruce ya teme por su puesto y se sondean a nuevos técnicos para liderar un nuevo proyecto millonario. Antonio Conte es el favorito, según publicó La Gazetta dello Sport, pero aún no se han esbozado más planes sobre la negociación. Cualquiera que llegue tendrá el objetivo de sacar a las urracas de la decimonovena posición en la que están colocados. En los despachos, el Newcastle quiere a Jason Wilcox, del Manchester City, para la posición de director deportivo.
Con respecto a los fichajes para la plantilla, las certezas todavía son pocas. Suenan algunos nombres como Keylor Navas, Mauro Icardi o Dele Alli, pero la lejanía del mercado invernal todavía hace complicada la negociación de estas llegadas que darían un salto de calidad a los de St James Park. En el pasado, otros como Cavani, Bale o Coutinho también estuvieron relacionados con el club. Según The Telegraph, hay dos jugadores en la órbita directa del Newcastle. Uno es Jesse Lingard, del Manchester United, y el otro es James Tarkowski, del Burnley, de quien se cita que está muy interesado en el fichaje.
Además, tal y como publica el medio inglés, una leyenda del club estaría dispuesta a aceptar un rol de embajador del Newcastle. El elegido no es otro que Alan Shearer, el máximo goleador histórico de la Premier League, que a sus 51 años es una de las caras más reconocidas de los medios de comunicación en Inglaterra gracias a sus apariciones en la BBC y The Athletic.
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