Héctor Elías Durán Gauta, de 53 años, es caraqueño de pura cepa. Nació el 20 de junio de 1968 y siempre ha sido un hombre vivaz, sano, alegre productivo y orgulloso del oficio que durante más de 20 años ha cultivado, el de camarógrafo.
Actualmente, está pasando por una situación muy delicada de salud que le ha impedido seguir haciendo lo que tanto le gusta.
A causa de una diabetes que no sabía que padecía, hasta el año pasado, ha perdido una pierna y necesita con urgencia la ayuda de todos nosotros y de cualquier institución que tenga a bien proporcionarle una prótesis, para poder recuperar su calidad de vida.
Es bachiller y siempre fue muy trabajador. En entrevista con Curadas.com, relata que a principios de este siglo, en Radio Caracas Televisión (RCTV), pudo ingresar como motorizado.
«Estuve como motorizado en RCTV unos 6 u 8 meses y luego hice un curso de camarógrafo. En ese medio se podía crecer y me dieron la oportunidad», relató.
Dijo que durante sus años como camarógrafo en ese canal, pues trabajó en él hasta el cierre, cubrió varias fuentes, principalmente sucesos. Y a partir de allí también se desempeñó, en ese oficio, en otros medios de comunicación.
Afirma que ser camarógrafo es una profesión que le ha llenado la vida y que nació para ello. Pero, sostiene que puede enfrentar lo que sea y desempeñarse en cualquier oficio, solo si pudiera tener la prótesis que le devuelva la independencia y la movilidad.
La vida le cambió
Cuenta que en septiembre del año pasado, como de costumbre, iba para su trabajo. En esos días estaba lloviendo mucho y por ello se puso unas botas industriales.
Cuando se disponía a viajar en el Metro de Caracas, se consiguió con que había una falla y tuvo que bajarse en una estación y caminar por largo tiempo, hasta Plaza Venezuela, pues no había efectivo para poder abordar una unidad de transporte terrestre.
Ya de noche, al llegar a su casa y quitarse los zapatos, encontró que tenía el pie ensangrentado, porque una ampolla que se había formado, tras la larga caminata, se había reventado.
Cuenta que esto le ocurrió el viernes y como era fin de semana, él se curó por su cuenta, pero el lunes tuvo que ir al médico, porque la herida no sanaba.
Señala que acudió a varios hospitales, pero no lo atendieron, porque solo estaban tratando personas afectadas por la COVID-19.
Hasta que, finalmente, lo recibieron en un CDI, donde lo revisaron y le dieron una orden para que lo atendieran en un hospital, pero tampoco lo recibían en los centros de salud, por el problema de la pandemia.
No obstante, Durán le contó a una vecina que trabaja en el Hospital Militar lo que le sucedía y ella se ofreció a permitir que lo recibieran.
Cuando por fin lo pueden ver los médicos, la herida de su pie estaba infectada, porque ya habían pasado varios días.
«Allí comenzó mi dolor de cabeza. En el hospital Militar me atendieron durante dos semanas y allí es que me amputan mi primer dedo», indicó Durán.
A partir de ese momento, su situación fue empeorando hasta que le amputaron otro dedo y otro en cuestión de dos meses ya le había amputado el pie y luego la pierna izquierda, por encima de la rodilla.
Padecimiento silencioso
Héctor Durán no sabía que sufre de diabetes tipo 2. Cuenta que nunca tuvo síntomas. «Yo me sentía bien, solo me daba una gripe de vez en cuando», dijo.
Aunque, ya sufría por los triglicéridos altos y el colesterol, nunca se imaginó que padeciera de esta enfermedad que ahora demanda un tratamiento diario con metformina y sus chequeos regulares.
Por ello, recomienda a las personas que se cuiden, que vigilen su alimentación y que estén muy pendientes de su salud.
Durán vive solo. Sus familiares están lejos de Caracas y su situación tampoco les permite ocuparse de él.
«Gracias a Dios, en mi trabajo (un canal de TV), aún estoy en nómina y me pagan mi sueldo. Mis compañeros a veces me ayudan con el mercado y el tratamiento y un vecino también me ayuda», señala.
Ayuda
El objetivo de Curadas.com, al presentar esta historia, es ayudar a Héctor Duran, haciendo una campaña a su favor, a la cual se ha unido el periodista Luis Olavarrieta.
Las personas que quieran colaborar con esta causa puede contactar a Héctor Durán, CI 6.297.204, a través del celular: 0412 8017231.
Y para cualquier colaboración, mediante la cuenta corriente del Banco mercantil nro 01050017651017558213, a nombre de Héctor Durán.
Janet Yucra
Entre todos te vamos a ayudar , no estás solo!