Esta bebida de atole de coco consentirá a tu paladar durante estos días de mucho frío, así que no lo pienses más y ¡prepáralo!
No hay nada peor que las mañanas frías de invierno, excepto eso mismo, pero sin tener algo para sentirnos mejor con el clima. Afortunadamente existen diferentes opciones para que nuestras gargantas, paladar y estómago entren en calor y que no se nos congele nada. Funcionan muchas cosas: Desde lo picoso, hasta lo dulce, pero bien calentito. Por eso te traemos este rico atole de coco para un desayuno diferente.
Por eso queremos compartirte nada más y nada menos que una receta para que prepares una receta confiable, que es un rico y delicioso atole de coco, que seguramente consentirá a tu paladar, así que no lo pienses más y dedícanos unos minutos de lectura, porque seguramente te hará sentir mucho mejor después de que te lo tomes.
El atole parece una bebida cualquiera, pero en realidad es un desayuno nutritivo, que contiene varios nutrientes, como los carbohidratos de la masa o fécula de maíz con la que se puede elaborar, proteínas, de la misma, más vitaminas y minerales de la fruta que uses para elaborarlo. Existen muchas recetas frutales, como los de fresa, guayaba, piña, zarzamora y tamarindo, pero nuestra versión para elaborar uno de coco es un poquito más dulce.
Ingredientes:
- 800 ml. de leche entera
- 1 lata de leche evaporada
- ½ taza de azúcar
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 300 ml. de leche de coco
- 300 ml. de
- agua de coco
- 100 gr. de coco rallado
- 4 cucharadas de fécula de maíz
- 5 cucharadas de agua
Preparación:
1-En un bowl o recipiente profundo, agrega la leche y agua de coco. Una vez todo incorporado, agrega el coco rallado y lo dejas reposar por 15 minutos para que se suavice y no quede tieso a la hora de beber.
2-En una olla, añade la leche evaporada, entera y azúcar. Calienta todo a fuego medio hasta que esté a punto de hervir. Es importante que mezcles ocasionalmente para que se incorpore muy bien.
3-Ahora agrega el extracto de vainilla.
4-Licúa la mezcla de coco y viértela sobre la olla o cacerola donde está la leche. Mezcla bien para que se integre. Si no quieres residuos de coco, puedes colar tu mezcla.
5-Mezcla la fécula de maíz con el agua hasta que se diluya por completo, esto hará que el atole espese, pero es importante que se disuelva perfectamente para que no se formen grumos.
6-Agrega la fécula de maíz y mezcla hasta que se incorpore perfectamente. Lleva a ebullición y continúa mezclando hasta que se espese o tome la textura que a ti te gusta.
¡Listo!
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Fuente GASTROLAB