Esta receta de salsa bechamel es la base perfecta para muchas preparaciones y te permitirá añadir un toque de elegancia y sabor a tus platos favoritos
La salsa bechamel es una de las «salsas madre» en la cocina francesa, y muchas recetas clásicas se basan en ella. Es rica, cremosa y blanca, esta es la base de la cual surgen las lasañas, gratinados y croquetas, y cuando hay tantos usos para la misma, es una constante en la cocina.
La bechamel en sí una salsa suave en sabor, es ideal para carnes, verduras y pastas, y da a tus platos un sabor y textura cremosos. Aunque la bechamel, a simple vista, puede parecer algo técnica, seguir las medidas y un poco de práctica podrían convertir a cualquiera rápidamente en un maestro de esta técnica básica de cocina.
Esta salsa es ideal para medir tus habilidades en la cocina o para hacer un puré exquisito en casa. Es más saludable y una creación mucho más de moda que las variedades empaquetadas y procesadas que son tan convenientes en nuestras tiendas locales de comestibles. La bechamel es una receta eterna que, una vez que la dominas, te da un millón de oportunidades en tu hogar, ya sea para experimentar o para hacer platos que impresionarán a tu familia y amigos.
A continuación, te mostramos cómo prepararla de manera sencilla y efectiva. Esta receta es para 4 porciones y te tomará alrededor de 20 minutos de preparación y cocción.
Ingredientes:
- 50 g de mantequilla
- 50 g de harina
- 500 ml de leche
- Sal al gusto
- Nuez moscada al gusto
- Pimienta blanca al gusto
Preparación:
1-Derrite la mantequilla en una olla a fuego medio, una vez derretida, añade la harina y mezcla bien con una cuchara de madera. Cocina durante unos 2-3 minutos, removiendo constantemente hasta que la mezcla adquiera un color dorado claro. Este paso es crucial para eliminar el sabor a crudo de la harina.
2-Añade la leche gradualmente sin dejar de remover para evitar que se formen grumos. Es recomendable que la leche esté tibia para facilitar la mezcla. Continúa removiendo hasta que la salsa comience a espesar.
3-Una vez que la salsa haya alcanzado la consistencia deseada, condimenta con sal, nuez moscada y pimienta blanca al gusto. Sigue cocinando a fuego bajo durante unos 5 minutos más, remueve de vez en cuando.
4-Una vez lista, puedes utilizar la bechamel inmediatamente en tu receta, o dejarla enfriar y guardarla en la nevera para usarla más tarde. Si la refrigeras, cubre la superficie con film plástico para evitar que se forme una capa dura.
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Fuente GASTROLAB