Karol Kot fue un asesino en serie polaco, conocido como «El Vampiro de Cracovia». Sus crímenes, cometidos en su adolescencia y juventud, aterrorizaron la ciudad entre 1964 y 1966
Lo que hizo a su caso particularmente perturbador fue la aparente falta de un motivo claro más allá del placer sádico y el deseo de causar sufrimiento y muerte. Karol Kot.
Los crímenes de Karol Kot, variados y brutales, afectaron a víctimas de diferentes edades y géneros.La naturaleza de sus ataques era indiscriminada; sus víctimas variaban en edad desde niños hasta ancianos, y sus métodos eran crueles. Los crímenes no estaban motivados por el robo o la agresión sexual, sino por el deseo de matar y experimentar con la muerte. Él mismo describió cómo disfrutaba del sufrimiento de sus víctimas y del miedo que generaba.
La caída de Karol Kot ocurrió porque se jactó de sus crímenes. Después de cometer varios ataques, Kot, que era un estudiante de ingeniería, comenzó a hablar de sus actos con una compañera, Danuta. Ella, alarmada por lo que escuchaba, informó a las autoridades.
Lo arrestaron el 1 de junio de 1966, el día después de haber presentado su examen de matura (el equivalente a los exámenes finales de bachillerato), lo que se le permitió hacer para que no pudiera alegar insanidad durante el juicio.
Durante el juicio, Karol Kot confesó todos los crímenes de los que se le acusaba. Los expertos psiquiátricos lo describieron como una persona con sadismo y un profundo deseo de matar, pero también se especuló sobre una posible anomalía cerebral (algunos informes post-mortem, aunque disputados, sugirieron un tumor cerebral).
El 14 de julio de 1967, Karol Kot fue sentenciado a muerte.
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