Roberto Succo fue un notorio asesino en serie italiano que aterrorizó a Italia, Francia y Suiza a mediados de la década de 1980
Es una figura compleja y perturbadora en la criminología, conocido por su carisma y su aparente falta de remordimiento, así como por sus múltiples fugas. Roberto Succo.
Nacido en Mestre (Venecia, Italia) el 3 de abril de 1962, la historia criminal de Roberto Succo comenzó trágicamente a una edad muy temprana.
Asesinato de sus padres (1981): A los 19 años, el 12 de abril de 1981, Succo asesinó a su madre, María Lamon, apuñalándola 32 veces. Horas después, cuando su padre (Nazario Succo, un oficial de policía) regresó a casa, lo golpeó mortalmente con la parte trasera de un hacha. La razón de estos crímenes fue fútil: sus padres se habían negado a prestarle su coche. Después de los asesinatos, ocultó los cuerpos en la bañera de su casa.
Arresto e internamiento: Lo arrestaron poco después. Tras ser declarado con esquizofrenia paranoide y trastorno antisocial de la personalidad, lo condenaron a 10 años de internamiento en un hospital psiquiátrico judicial en Reggio Emilia.
En mayo de 1986, Succo logró escapar del hospital psiquiátrico durante un permiso, y huyó a Francia.
Una vez en libertad, Succo inició una serie de crímenes violentos en Francia y Suiza, utilizando a menudo identidades falsas, como «Kurt». Su capacidad para evadir a la policía y la naturaleza aleatoria y brutal de sus ataques lo convirtieron en el «enemigo público número uno» en varios países.
Sus crímenes fueron complejos y desconcertantes para las autoridades, ya que no seguían un patrón geográfico fijo y Succo se movía constantemente, cambiando de vehículos y de apariencia.
Finalmente capturaron a Roberto Succo el 28 de febrero de 1988 en Mestre, Italia, su ciudad natal, después de que lo reconociera por una estudiante.
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