Con una boina roja similar a la que usaba el fallecido Hugo Chávez, una medalla y una túnica negra, el presidente Nicolás Maduro recibió un doctorado honoris causa en «materia de seguridad» otorgado por una universidad militar.
Maduro recibió este honor cuando ya van varias semanas de un despliegue de buques de guerra de Estados Unidos en el Caribe, que su gobierno denuncia como un asedio.
«Puedo decir siete semanas después (…) Venezuela hoy tiene más poder para defenderse», aseguró el mandatario izquierdista.
«Estamos en una época de cambio acelerado de la geopolítica mundial, que se manifiesta en distintos escenarios; el planeta está pasando de la vieja era imperial, colonialista y neocolonialista a una nueva era, una nueva época humana, que incluye todas las regiones del planeta», dijo en su discurso.
Lea también:
«Tengo mi toga y mi boina de combate», dijo desde una tarima acompañado por el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, y miembros del alto mando militar, en un acto transmitido en cadena nacional.
El mandatario ofreció una «lección magistral» en un auditorio de la Universidad Militar Bolivariana, una de las doce academias militares del país.
Defendió que las operaciones militares ordenadas las últimas semanas son «para ejercitar el músculo nacional» y garantizar la soberanía.
«Es un honor inmenso recibir de manos militares un título honorable», afirmó Maduro al asegurar que su gobierno ha resistido una «guerra multiforme» desde Estados Unidos con «sabiduría».
Maduro cuestionó las acusaciones del secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, que vincula a militares venezolanos con supuestos cárteles de drogas.
«Con su indecencia y su inmoralidad, ha dicho que los cuarteles de Venezuela son el epicentro del tráfico de droga», indicó. «Rechazo y repudio las expresiones de Marco Rubio y salgo en defensa de la moral de nuestros soldados», recalcó Maduro.
El presidente estadounidense, Donald Trump, lo acusa de encabezar supuestas redes de narcotráfico y justifica el uso del «poderío militar» de su país en el Caribe en la lucha contra el narcotráfico.
La justicia estadounidense aumentó en agosto pasado a 50 millones de dólares la recompensa por información que conduzca a la captura de Maduro, que tacha los señalamientos de mentiras que buscan una invasión extranjera en Venezuela para apoderarse del petróleo.
Con información de agencias y VTV