Caminas todos los días pensando que eso te va a mantener mucho más fuerte después de los 60
Yo veo mucha gente saliendo a caminar y quiero contarte algo incómodo, algo que quizás no te va a gustar nada y es que caminar puede estar dándote una falsa sensación de seguridad, de que las cosas están bien y no es que sea malo. Caminar después de los 60. Imagen superior de Susanne Nicolin en Pixabay
Caminar después de los 60
Caminar es excelente, sino porque no protege e, incluso, pues no te va a hacer quitarte la independencia, que eso es lo que todos queremos tener cuando vamos entrando a la edad de oro. Si, y a todo ese tiempo maravilloso que ha de venir o que ojalá venga para todos y que te deseo lo mejor. Pero eso no va a ser suficiente.
Por eso, quédate conmigo porque, hoy voy a explicarte por qué muchas personas caminan una hora diaria y siguen cayéndose, siguen teniendo problemas en la marcha, siguen teniendo un montón de complicaciones metabólicas. Y quiero contarte qué movimientos simples realmente marcan una diferencia. Listo.
Entonces, durante años nos han dicho algo y es que caminar es el mejor ejercicio para envejecer bien. Y en parte es cierto, estamos claros que necesitamos movernos, caminar mejor al corazón, la circulación, el estado de ánimo. Es una práctica de contemplación casi que una maravilla.
A mí me encanta hacerlo para salir a pensar en ideas cuando he escrito libros, cuando estoy pensando en la estructura de algún curso, de algún taller, me encanta. Pero, hay una pregunta que nadie se hace y es que es suficiente para mantenerme fuerte. También, para mantenerme estable, para mantenerme autónomo y aquí es donde empieza la mayoría del problema de las personas y ahí es donde empieza la verdad que nadie dice.
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