Aunque el lugar de nacimiento de Jesús es tradicionalmente Belén (cerca de Jerusalén), la evidencia histórica es incierta
La Iglesia de la Natividad se construyó en el s. IV por orden de Santa Elena, siglos después del evento. Y dos evangelios mencionan que Jesús venía de Nazaret. La verdad tras el pesebre de Belén. Imagen superior de Christiane en Pixabay
La verdad tras el pesebre de Belén
Una teoría arqueológica reciente propone que Jesús pudo nacer en otra población llamada Belén de Galilea, más al norte, cercana a Nazaret, lo que plantea una gran duda sobre el verdadero lugar de inicio de su historia.
Aunque existen muchos misterios en torno a la historia de Jesús, el lugar donde comienza no es uno de ellos. Pero, ¿sería posible que ese lugar no fuera en realidad Belén?
Cada Navidad los fieles veneran el nacimiento de Jesucristo. Los belenes decoran las fachadas de las iglesias y las casas. Y en el centro de esta alegre y familiar escena se encuentra el niño Jesús acostado en un pesebre en la pequeña ciudad de Belén. Una de las primeras cosas que enseñan en la escuela dominical es que María, la futura madre de Jesús, estaba comprometida con un carpintero llamado José. Pero antes de que ambos consumaran el matrimonio, María quedó embarazada, lo cual es sorprendente, ya que era virgen.
Un ángel se apareció a María y luego a José en un sueño y les dijo que no se preocuparan, porque ese niño había sido concebido por el Espíritu de Dios. Poco antes de que naciera el hijo, María y José fueron obligados a hacer un viaje.
Cuenta el relato bíblico que el emperador romano César Augusto decretó un censo y cito de toda la tierra habitada. En el evangelio de Lucas, José y María, quien estaba embarazada, tienen que dejar su hogar en Nazaret y viajar a Belén. Este era el pueblo natal de José y las reglas del censo exigían que cada persona se registrara en su lugar de origen.
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