Algunas fortalezas se construyeron para proteger lo sagrado; otras, para fines más siniestros
Exploramos las historias detrás de las estructuras más imponentes del mundo, desde muros infranqueables, fortalezas intimidantes y ríos místicos que fueron utilizadas para propósitos oscuros. Fortalezas sagradas.
Fortalezas sagradas
De imponentes fotalezas. Los romanos derriban todas las fortalezas judías de la región, pero dejan masada para el final. Toman esta fortaleza construida para mantener a los invasores fuera y la convierten en una prisión para mantener a los disidentes religiosos adentro de una torre infame. Los que sobreviven a la masacre son los que consiguen entrar a salvo en la torre e incluso una barricada sobrenatural.
Para que el alma de una persona llegue al infierno, necesita la ayuda de un dios para cruzar ese río. Veamos los fascinantes relatos detrás de las más imponentes maravillas sagradas.
Una de las figuras más infames de la Biblia es un rey conocido por sus proyectos de construcción. De todas sus ambiciosas fortalezas hay una que destaca por encima de todas. Así, alrededor del año 63 a.C., el general romano Pompello el Grande conquista Judea en nombre de Roma. En Jerusalén instalan a un rey vasallo llamado Herodes, a quienes eligieron para ejecutar fielmente sus políticas.
Aunque el rey Herodes es un títere de los romanos, no es tonto. Sabe que su pueblo judío tiene muchos enemigos que pueden atacar en cualquier momento, así que decide construir algo como un refugio llamado Masada.
Masada significa fundación fuerte en hebreo. Será una fortaleza y un retiro real. La construcción comienza alrededor del año 30 a.C. Herodes elige una meseta de alrededor de siete hectáreas a unos 400 metros sobre el Mar Muerto.
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