Los habitantes del municipio Monseñor Iturriza, de Chichiriviche en el estado Falcón, llevan 17 horas sin energía eléctrica, una situación alarmante que disminuye la calidad de vida en la zona turística de Venezuela.
la falla se originó a las 6:00 p.m. del viernes y se mantiene hasta las 11:30 a.m. de este sábado. Adicional a esto, en la mañana del 13 de noviembre no hubo desde las 8:00 a.m. hasta las 10:00 a.m energía eléctrica. Es decir, en 24 horas llevan más 19 horas sin el servicio y en la semana acumulan 39 horas sin electricidad.
El apagón se debe a una falla en la interterconexión La Arenosa- Planta Centro, según informó el periodista en Falcón José López en la red social Twitter. Sin embargo, la misma no ha sido confirmada por la empresa encargada Corpoelec, siendo el silencio de la compañía un «desespero» para los habitantes.
La generación eléctrica de Planta Centro, que alimenta a la zona, se encuentra en estado precario. La ciudad de Puerto Cabello, en el estado Carabobo, dependía del sistema integrado de la refinería del Gurí. Cuando el sistema nacional comenzó a decaer, la ciudad pasaba hasta tres días continuos sin el servicio eléctrico. Para solventar la situación desincorporaron al puerto marítimo venezolano, del sistema nacional y lo conectaran al circuito autónomo de Planta Centro que, con una sola turbina trabajando, no soporta la demanda de carga que se le añadió. Esto sería la razón del problema, según informó una fuente extraoficial a Curadas.
Esta situación se suma a la falta de aseo urbano, mala señal del internet, la escasez del agua y del gas doméstico en la entidad, donde los habitantes denuncian que por una bombona de gas cobran hasta 10 dólares, frente a un salario mínimo mensual de menos de dos dólares, obligando a las personas a cocinar a leña.
A principios de noviembre en el municipio Monseñor Iturriza comenzaron las lluvias amenazando a los habitantes del sector. Las casas se inundaron y reportaron grandes pérdidas materiales mientras los representantes de las alcaldía no responden ante la situación.
Con los drenajes tapados ante la falta de mantenimiento, las calles inundadas son testigos y muestra de los estragos en la zona.
Redacción Betzimar Carballo