Si estás buscando nuevas formas de integrar a tu dieta alimentos que contribuyan a tu salud, estas deliciosas albóndigas de espinacas son las indicadas para el almuerzo, la merienda o la cena
Elaborar estas albóndigas de espinacas te tomará menos de 30 minutos. Lo mejor de todo es que puedes preparar este delicioso platillo cargado de una gran cantidad de nutrientes esenciales para el organismo, con ingredientes saludables que seguro tienes en tu cocina.
Sabías que el color verde intenso de la espinaca se debe a la presencia de nitratos ricos en vitaminas y minerales. Este vegetal, cuyo consumo se popularizó en el año 1929 a partir de la aparición de una tira cómica del personaje animado Popeye, incrementa la vitalidad y mejora la calidad de la sangre gracias a su alto aporte en proteínas sin a la vez contener grasas ni calorías.
Si bien es fuente de vitamina K, la espinaca también tiene un alto contenido de vitamina A, C, B6, B2, B1, ácido fólico, potasio, magnesio, Omega 3 y antioxidantes como los flavonoides y carotenoides. Ahora que sabes todo lo que tiene para ofrecerte este increíble vegetal, te mostramos cómo aprovechar sus maravillosas propiedades preparando estas albóndigas de espinacas.
¿Qué necesitas?
-2 paquetes de espinacas frescas.
-Dos cebollas pequeñas.
-2 huevos.
-Pan rallado.
-50 gr de queso curado rallado.
-20 gr de pan rallado.
-Orégano.
-Aceite de oliva virgen extra.
-Sal y pimienta.
¿Cómo prepararlas?
1-Lo primero que debes hacer es desinfectar las espinacas en una solución de agua y vinagre, luego enjuaga con abundante agua, escurre buena parte del líquido y cocina al vapor durante cinco (5) minutos o menos, de tal manera que se mantenga su característico color verde intenso y la hoja conserve su textura firme.
2-En un sartén con aceite sofríe la cebolla a fuego medio hasta dorar. Una vez frías las espinacas, pica finamente y dispón en un recipiente con la cebolla, los huevos previamente batidos, el queso, el pan rallado, el orégano, la pimienta y una pizca de sal. Mezcla por unos segundos para formar las albóndigas.
3-Coloca las albóndigas sobre una bandeja antiadherente y deja reposar durante dos horas en el refrigerador antes de la cocción. Transcurrido el tiempo, hornea a 180ºC durante 20 minutos. Al momento de servir puedes acompañar con salsa de tomate casera o si prefieres puedes comer sin ningún tipo de aderezo.
Tomado de MUI FITNESS
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