El gobierno de China no tardó en tomar represalias, luego de que EEUU exigiera el cierre de su consulado de Houston, Texas.
Este viernes exigió el cese de operaciones del consulado de EEUU en la provincia de Chengdu.
Los diplomáticos estadounidenses en China habían sido notificados el viernes por la mañana de que Beijing los expulsaría.
Les revocaron la licencia para el consulado de Chengdu, y se ordenó “detener todos los negocios y actividades”, detalla CNN.
El detonante fue lo que ocurrió en Houston y alegaron que EEUU ha “provocado unilateralmente el incidente”.
«Violaron seriamente el derecho internacional y las normas básicas de las relaciones internacionales», agregaron al comunicado.
“Instamos a EEUU a revocar la decisión errónea para que las relaciones bilaterales vuelvan a la normalidad”, también dice el comunicado.
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El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Wang Wenbin dio las razones del cierre.
Acusó al personal del consulado de Chengdu “de interferir en los asuntos internos de China y dañar los intereses de seguridad nacional”.
Chengdu, la capital de la provincia de Sichuan, es un importante puesto diplomático para EEUU que incluye la Región Autónoma Tibetana.
Hasta el momento el Departamento de Estado de EEUU no se ha pronunciado sobre esta medida de China.
Sin embargo, se espera una reacción en cualquier momento, pues el tema se convirtió en prioridad.
Las últimas informaciones detallan que EEUU sigue con la investigación del supuesto espionaje que se hacía desde el consulado de China.
Según datos filtrados a los medios de ese país, los chinos intentaron obtener información secreta sobre la vacuna contra la COVID-19.
Se habla de que se infiltraron en varias empresas que adelantan las investigaciones sobre la cura del virus.
Redacción Curadas.
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