Kabul, 16 feb (EFE).- Las fuerzas especiales del Ejército afgano rescataron a 42 prisioneros, entre ellos 17 civiles, de una cárcel controlada por los talibanes en la provincia de Baghlan, en el norte de Afganistán, según informaron este martes.
La operación de liberación se cursó el lunes por la noche en Ali-Khwaja, un área insegura que se encuentra bajo el dominio de los insurgentes.
«Nuestras fuerzas especiales realizaron anoche una redada nocturna en una cárcel talibán en la que rescataron a 42 presos», explicó a Efe el portavoz del Cuerpo de Operaciones Especiales del Ejército afgano, Abdul Ghafar Nuristani.
El portavoz detalló que entre los liberados, todos ellos hombres, se encuentran 25 miembros de las fuerzas de seguridad y 17 civiles.
La mayoría de ellos habían sido capturados por los talibanes durante los últimos meses en las carreteras acusados de trabajar o cooperar con el Gobierno.
«Tras la operación, trasladamos a los rescatados a la provincia norteña de Balkh para que puedan reunirse con sus familiares después del reconocimiento médico y los procedimientos administrativos», precisó Nuristani.
Seis guardias de la prisión huyeron al comienzo del operativo, por lo que no se produjeron enfrentamientos ni bajas.
El Ministerio de Defensa afgano indicó en un comunicado que algunos de los prisioneros llevaban más de dos años retenidos y habían sido torturados por los insurgentes.
Las fuerzas especiales afganas han rescatado en el último mes a algo más de un centenar de reclusos de las cárceles talibanas.
ÚLTIMA EXIGENCIA DE LOS TALIBANES
Estas operaciones se producen en un momento en el que las fuerzas de seguridad afganas han adoptado una posición defensiva para reducir la violencia en el país, como parte de las conversaciones de paz en curso en Doha entre los insurgentes y el Gobierno afgano.
Esas conversaciones intraafganas comenzaron el pasado 12 de septiembre; sin embargo, tras cinco meses de negociaciones, no se han logrado avances significativos.
Ese inicio del diálogo vino precedido de un histórico acuerdo el pasado febrero también en Doha entre los talibanes y Estados Unidos, en el que se pactó la retirada de las tropas estadounidenses de Afganistán en 14 meses y el compromiso insurgente de que no permitirían a terroristas asentarse en territorio afgano.
Además, se decidió la liberación de 5.000 talibanes y un millar de miembros de las fuerzas de seguridad afganas como paso previo para el inicio de las conversaciones intraafganas.
Pero los talibanes exigen ahora la liberación completa de sus prisioneros, convirtiéndose éste en uno de los principales obstáculos para el reinicio de las conversaciones entre el Gobierno y los insurgentes, que debían haberse reanudado hace un mes.
Curadas / Vía Agencia EFE