Prestar atención a los hábitos de orina puede ayudar a identificar un cáncer de vejiga en sus primeras etapas
La vejiga es el órgano hueco que almacena orina en la parte inferior del abdomen. En la vejiga también se encuentran las células que originan uno de los tipos de cáncer más comunes.
La detección del cáncer de vejiga suele darse en las primeras etapas, pues sus síntomas son evidentes. El signo más común es la presencia de sangre en la orina, algo conocido como hematuria. Esto puede provocar que la orina adquiera colores naranja, rosa, e incluso, rojo oscuro.
Sin embargo, la hematuria no siempre es constante. A veces puede existir sangre en la orina un día y al otro día no. Otras veces, la orina aparece del color normal, pero siguen habiendo rastros de sangre.

El resto de los síntomas incluye ardor o dificultad para orinar, sentir ganas de orinar así la vejiga no esté llena, y tener un flujo débil de orina. El dolor de espalda puede ser también un indicador de problemas con la vejiga.
La mayoría de los cánceres de vejiga se diagnostican en etapa inicial, cuando el cáncer es altamente tratable. Pero incluso los cánceres de vejiga de etapa inicial pueden volver después de un tratamiento exitoso. Por esta razón, las personas con esta enfermedad suelen necesitar pruebas de seguimiento durante años después del tratamiento para detectar la reaparición de un cáncer de vejiga.

La Sociedad Americana de Cáncer enlista los síntomas de un cáncer de vejiga más avanzado:
- No poder orinar
- Dolor en un lado de la espalda baja
- Pérdida de apetito y pérdida de peso
- Cansancio o debilidad
- Hinchazón en los pies
- Dolor en los huesos
Ya que varios de estos síntomas pueden ser causados por diferentes patologías, es necesario acudir a un médico si hay sospechas de que puede haber un cáncer de vejiga.
Tomado de EL UNIVERSO
CURADAS | Tu compañía en información…