La historia de la supuesta inmortalidad de la hija de Hieronymus Makropulos
Elina Makropulos sirvió de conejillo de Indias a su padre, médico personal del emperador Rodolfo II que intentaba crear un elixir de eterna juventud.
El Secreto de la Eterna Juventud
La trama de «El caso Makropulos» gira en torno a la búsqueda de un elixir de la eterna juventud. La historia se desarrolla en Praga en el siglo XX, donde una famosa y misteriosa cantante de ópera, Emilia Marty, se involucra en un litigio legal centenario por una herencia.
Conforme avanza la historia, se revela la verdadera identidad de Emilia Marty: ella es Elina Makropulos, nacida en Creta en 1585. Su padre, un alquimista griego y médico personal del emperador Rodolfo II, había creado un elixir para prolongar la vida y lo probó en su propia hija, Elina, cuando ella tenía 16 años.

Gracias a este elixir, Elina ha vivido por más de 300 años, cambiando de identidad (siempre manteniendo las iniciales E.M.) y reinventándose en diferentes épocas y lugares, siempre como una mujer brillante y talentosa. Su existencia se ha mantenido gracias a dosis del elixir, cuya fórmula original está ahora en el centro de la disputa legal.
La Fatiga de la Inmortalidad
A medida que los efectos del elixir comienzan a desvanecerse y necesita una nueva dosis para vivir otros 300 años, Emilia Marty (Elina Makropulos) se obsesiona con recuperar la fórmula. Sin embargo, a lo largo de la ópera, se explora el lado oscuro de la inmortalidad. A pesar de su juventud aparente y su brillo, Elina/Emilia es una figura profundamente cansada, cínica e insensible.
Ha vivido y experimentado tanto a lo largo de los siglos que la vida ha perdido todo su significado para ella. El amor, la pasión, la ambición, todo se ha vuelto vacío y repetitivo. Ya no siente verdadera emoción. Su prolongada existencia la ha aislado y la ha llevado a una profunda apatía y hastío.
¿Te gustó el artículo? Como sabes, tenemos mucho más para ti. Únete a Curadas haciendo clic en este enlace