Miopía e insomnio podrían tener una relación muy estrecha, según estudio

La miopía es un problema de la refracción que se manifiesta cuando el paciente percibe borrosos los objetos lejanos. Además, suele afectar a ambos ojos, aunque no necesariamente en el mismo grado

La miopía es quizá el desorden de la vista más común: se estima que en el mundo casi el 30% de la población la padece.

Su prevalencia es mayor entre adultos, aunque suele iniciar en la adolescencia, y algunos niños en edad escolar también la presentan.

Las personas con miopía tienen dificultad para enfocar objetos lejanos, eso además de les impide ver bien, puede causarles dolores de cabeza y otras molestias.

En general se corrige fácilmente usando anteojos, lo que disminuye también otras molestias. Pero parece ser que la miopía podría estar asociada a otros inconvenientes, más allá de la visión.

Errores de refracción

La miopía ocurre por ciertos defectos en la forma del globo ocular, el más común es que este crezca en longitud más de lo normal.

Esto hace que el lente del ojo, el cristalino, no proyecte las imágenes en el punto exacto donde debería, en la retina, sino un poco más adelante.

Por esta razón la miopía se considera una ametropía o error de refracción: igual que el astigmatismo, la hipermetropía y la presbicia, también conocida como vista cansada.

En todas estas afecciones de la vista la proyección de las imágenes no ocurre en el punto preciso de la retina, debido a que algún defecto en la forma del ojo no lo permite.

Cuando las imágenes se forman en un punto anterior a la retina, no vemos bien las cosas lejanas, como en la miopía; cuando se forman en un punto posterior, no vemos bien las cosas cercanas como en la hipermetropía.

Afortunadamente todos estos errores de refracción pueden corregirse con lentes, que logran enfocar la luz en el punto exacto de la retina y así podemos ver bien cuando usamos anteojos o lentes de contacto.

Miopía y sueño

Un estudio reciente, publicado por un grupo de científicos australianos en la revista especializada Sleep, concluye que la miopía y el insomnio podrían tener una relación muy estrecha.

En la investigación participaron 32 voluntarios, 18 de ellos con miopía: a todos se les midieron las concentraciones de melatonina en la saliva y en la orina, antes y después de dormir.

La melatonina es una hormona que produce el sistema nervioso central para regular los ciclos de sueño-vigilia: una cantidad baja de melatonina indica alteraciones en esos ciclos.

Los investigadores encontraron que, los voluntarios miopes, producían menos melatonina, comparados con quienes tenían una vista normal.

La relación podría estar en que los mismos hábitos que favorecen la miopía, interrumpen nuestros ciclos de sueño.

Piénselo un poco: estar sometidos a luz artificial durante todo el día y observar pantallas durante mucho tiempo, incluso en las noches, termina siendo malo para la vista, pero también para conciliar el sueño.

Y recordemos que dormir bien, no solamente nos ayuda a descansar, sino a consolidar memorias y aprendizajes durante el día e incluso a “limpiar” nuestro cerebro.

Así que si tienen miopía o no, de cualquier forma sería bueno que reconsideraran algunos de sus hábitos: eso no solamente ayudará a que su vista no empeore, sino a que su cerebro funcione mejor.

Y recordemos que dormir bien, no solamente nos ayuda a descansar, sino a consolidar memorias y aprendizajes durante el día e incluso a “limpiar” nuestro cerebro.

Así que si tienen miopía o no, de cualquier forma sería bueno que reconsideraran algunos de sus hábitos: eso no solamente ayudará a que su vista no empeore, sino a que su cerebro funcione mejor.

Tomado de FAYERWAYER

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