El Real Madrid se ha hecho dueño y señor del Clásico. El Barcelona no fue capaz, en su estadio y ante más de 85.000 personas, de quebrar una tendencia que explica que hace tiempo que quedó atrás su última etapa dominante en el duelo de gigantes. Los últimos cuatro partidos, todos ellos de Liga, han acabado con victorias madridistas.
Los goles de David Alaba y Lucas Vázquez dan continuidad a una serie que arrancó en marzo de 2019, a las puertas del parón por la pandemia. Entonces, Vinicius y Mariano abrieron una puerta que la temporada pasada se mantuvo abierta con el 1-3 en Camp Nou y el 2-1 en Valdebebas.

El Madrid iguala así su segunda mejor series de victorias ante el Barcelona. Aún le queda trabajo para alcanza su mejor registro. Entre 1962 y 1965 logró sumar siete victorias seguidas en un duelo que por entonces aún caminaba por detrás en lo que a rivalidad se refiere con el derbi madrileño.
El Camp Nou es blanco
Con el 1-2, con el gol del Kun Aguero sobre el final del partido, que abre brecha en LaLiga entre los dos imperios de nuestro fútbol, el Madrid acumula además otra visita al Camp Nou sin salir derrotado. Eso no ocurre desde el 5-1 de octubre de 2018, el que sacrificó a Lopetegui. Desde entonces, el Madrid ha empatado dos veces (una Copa y otra en Liga) y ha ganado en sus dos últimas apariciones ligueras en el coliseo azulgrana.

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