En febrero de 2014, cuando misteriosos comandos enmascarados con uniformes verdes no identificados tomaron el Parlamento de Crimea y se desplegaron por toda la península, Vladimir Putin negó inicialmente tener nada que ver.
El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, recordó que la guerra de Ucrania tiene lugar en Europa y sostuvo que Reino Unido, Francia y Alemania deberían jugar un papel más protagónico.
Los ucranianos discuten sobre los pasos que podría dar Donald Trump, quien prometió en su campaña poner fin a la guerra “en 24 horas”.
Estados Unidos sancionó al coronel ruso Azatbek Omurbekov, apodado como el ‘Carnicero de Bucha’, a quien acusa de haber cometido graves violaciones de derechos humanos en la guerra de Ucrania.