El balance del paro armado ejecutado por Ejército de Liberación Nacional desde el pasado viernes 14 de hasta este 17 de febrero es de terror y zozobra, diversas zonas del Departamento Norte de Santander vivieron momentos de pánico con el hallazgo fe artefactos explosivos, panfletos y grafitis.
Las autoridades neogranadinas rechazaron las acciones terroristas emprendidas por esta organización guerrillera, aseguraron que la intención era generar un ambiente de calamidad y hacerse sentir a través de la violencia.
En la frontera entre Táchira y La Parada también se registraron detonaciones, la mayoría de los comerciantes de la zona prefirieron mantener sus negocios cerrados.
De igual forma, se notó poca presencia de vendedores informales, quienes reportaron grandes pérdidas.
El paso por los puentes internacionales que comunican al Táchira con Colombia, tuvo poca afluencia ante las amenazas del ELN.
Equipos antiexplosivos de la policía de Cúcuta acudieron a los lugares donde se alertó sobre la presencia de cilindros explosivos para desactivarlos, las autoridades indicaron que no permitirán que estos grupos terroristas sigan generando acciones contra la tranquilidad y la paz de la región.
En la zona norte del Táchira se mantiene una tensa calma ante los recientes enfrentamientod armados.