Beber demasiada agua solo causa hiperhidratación en raras ocasiones, ya que unos riñones normales excretan fácilmente el exceso de agua. Es frecuente que no haya síntomas, pero en la sobrehidratación grave pueden aparecer confusión o convulsiones
La hiperhidratación se produce cuando el organismo recibe más agua de la que elimina.
Está claro que el beber agua ayuda a eliminar toxinas, entre otras cosas; pero hacerlo en exceso puede ser mucho más perjudicial para tu salud de lo que imaginas, en algunos casos exagerados pueden causar la muerte.
En la noche del 15 de septiembre de 1987, los demonios alojados en el cuerpo de Oscar Gutiérrez, residente de San Antonio, en Texas, parecían estar celebrando algún evento especial en su estómago.
Desesperado, al poseso se le ocurrió beber, no solo un frasco con agua bendita, sino seis vasos de agua, en rápida sucesión. Alguien le había dicho que los súbditos de Satán odian al agua, y una manera de expulsarlos de su organismo, era ingerir grandes cantidades del vital líquido.
Quizás no fue más que pura coincidencia, pero a la media hora de haber bebido once vasos de agua, comenzó a sentir alivio, permitiéndole dormir.
Confiado en aquel procedimiento de «hidroexorcismo», continuaría tomando de doce a quince vasos diarios, para mantener a raya a los demonios.
Luego, y cierta noche, semanas después, decidió elevar aún más el consumo con la idea de expulsar del todos los maléficos invasores. Fue así cómo, y en un lapso de hora y media, se bebió uno tras otro, treinta y dos vasos de agua, sufriendo casi de inmediato fuertes convulsiones, falleciendo mientras era trasladado a un hospital.
A continuación, te invitamos a disfrutar del siguiente videoclip, mediante el cual conocerás el relato de la «Hidrosaturación»
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