La trombosis se puede confundir con una lesión de huesos, músculos o ligamentos. Sin embargo, el reposo y la compresión de la zona afectada no mejorarán las molestias, siendo necesaria la atención médica
Una trombosis es una afección que ocurre cuando se forma un coágulo de sangre en una vena o arteria, y por lo general se producen en alguna de las extremidades, principalmente en las piernas o pantorrillas.
No obstante, este problema de salud es cada vez más recurrente ya que existen hábitos muy comúnes de la vida diaria que la provocan sin que te des cuenta, ya que según relatan los especialistas, este padecimiento se puede confundir con una lesión de huesos, músculos o ligamentos. Sin embargo, el reposo y la compresión de la zona afectada no mejorarán las molestias, siendo necesaria la atención médica.
Hay factores que aumentan el riesgo de padecer una trombosis, como el estar hospitalizado durante un período largo de tiempo, tener antecedentes personales o familiares de coágulos de sangre, así como haber tenido cirugías relacionadas especialmente con el cáncer, la cadera o la rodilla. Los expertos en salud piden estar atentos a los siguientes síntomas de alarma:
- Dolor en alguna de las extremidades
- Moretones
- Inflamación del pie, el tobillo o la pierna
La trombosis es altamente mortal si el coágulo se desprende y viaja por el torrente sanguíneo hasta los pulmones o el corazón, causando un bloqueo llamado embolia y que puede llevar a sufrir un infarto. Pero si el coágulo es pequeño, con un tratamiento adecuado la persona se puede recuperar, aunque hay la posibilidad de que deje secuelas.
Esto se puede prevenir casi por completo si se evitan estos 3 hábitos que suelen pasar desapercibidos para la mayoría de las personas:
Mala alimentación
Para prevenir la formación de coágulos y la aparición de la trombosis se deben consumir regularmente alimentos que ayuden a controlar el colesterol y mejorar la circulación.
Es de gran relevancia tener una dieta rica en frutas, verduras y proteínas saludables. También se deben evitar alimentos muy grasosos, con altos niveles de azúcares, ya que la obesidad es un factor importante para sufrir de este padecimiento.
Poca actividad física
El sedentarismo y la falta de ejercicio provoca el riesgo de que se presente una trombosis, por lo que se recomienda no permanecer mucho tiempo acostado ni sentado, y se debe caminar al menos 30 minutos al día. El trabajo desde casa se ha vuelto un hábito en la actualidad y aunque la carga laboral también ha aumentado, se debe tomar el debido tiempo para estirar las extremidades e implementar una rutina de ejercicio.
Tabaquismo
Este hábito incrementa la viscosidad de la sangre y afecta a los pulmones, uno de los órganos más susceptibles ante la formación coágulos. Asimismo, el cigarro también afecta la circulación sanguínea, siendo un factor de alto riesgo para dar origen a una trombo.
Además de estos 3 hábitos que pueden provocar trombosis, también se debe tomar en consideración otros que sin que te des puede desencadenar este trastorno. Usar ropa muy ajustada o apretar accesorios de más como relojes o pulseras, pueden causar una mala circulación y producir coágulos en la sangre. El exceso de vitamina K también puede ser peligroso, así como el abuso de carbohidratos.
Tomado de TERRA
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