Memoria: Conozca la forma en que usted recuerda… y olvida (Parte I)

El almacenamiento de la memoria en el cerebro no es como una cinta de video que podemos hacer avanzar o rebobinar a voluntad.

Lo que se acaba de aprender y la formación antigua, así como los vínculos entre ambas cosas, se forman y destruyen constantemente en un proceso dinámico.

Memoria Implícita frente a Memoria Explícita

La memoria puede clasificarse en categorías de implícita y explícita. Cuando usted abre la puerta de su automóvil, gira la llave de contacto y empieza a conducir; lo que usted hace en realidad, ¿es un esfuerzo consciente por recordar la manera de realizar esta secuencia de acciones? Claro que no. El recuerdo de como conducir un automóvil es automático y es algo que está profundamente arraigado y lo habitual es que no tenga que prestar atención alguna.

El recuerdo de cómo conducir un coche exigió un esfuerzo mental consciente y «explícito» cuando tomó sus primeras lecciones de conducir, pero ahora ya es «implícita» o automática. Esta «macro» memoria que tiene muchos componentes deja espacio a la flexibilidad; por ejemplo, cuando conduce usted un automóvil de alquiler o el de un amigo.

Ajustarse a un nuevo vehículo, identificar la situación del tablero de mandos y de los controles le lleva unos momentos, pero pronto le toma usted el tranquillo y se encuentra circulando por ahí sin preocupación alguna. Pero su macro memoria de cómo conducir un automóvil no puede hacer cambios enormes como puede atestiguar cualquier conductor de automóvil que intenta montar en una motocicleta por primera vez.

Así que las células nerviosas que almacenan esta información no están hechas de cemento ni de acero, pero tampoco son como un bol de gelatina, sino que más bien son como un puñado de plastilina endurecida que sólo cambia de forma si se ejerce una fuerza considerable.

Las costumbres y las habilidades entran en la memoria implícita.

El condicionamiento clásico y otros tipos de memoria que también entran en esta categoría implícita, están relacionados con las reacciones reflejas sencillas, como por ejemplo apartarnos de un salto cuando tocamos un objeto caliente, cosa que ejecutamos automáticamente en nuestra vida diaria.

Pero cuando piensa en la «memoria», probablemente piensa en una cosa probablemente diferente: acontecimientos discretos, como recordar el cumpleaños de alguien o el lugar al que fue de vacaciones ya hace algunos años. Esta clase de memoria recibe el nombre de «episódica» o «relacionada con los acontecimientos» o memoria «implícita».

Tiene que hacer un esfuerzo consciente para recuperar la memoria explícita de un hecho o un acontecimiento, a diferencia de la memoria implícita de conducir un coche. En este tema yo utilizo generalmente la palabra memoria tal como se entiende corrientemente: La memoria explícita de acontecimientos específicos a corto y largo plazo.

En el caso de la explícita, hay tres elementos en la secuencia del recuerdo:

  1. La adquisición de la información. Las claves son la atención y la concentración.
  2. El almacenar el acontecimiento o episodio como un recuerdo. La importancia, el significado y el impacto emocional del acontecimiento determina si el cerebro lo almacenará como memoria.
  3. La recuperación. Es el proceso activo de llevar la memoria a la primera línea de la consciencia.

Hechos respecto al cerebro humano

  • Representa el dos por ciento del peso corporal.
  • Consume el veinticinco por ciento de la glucosa y oxígeno del cuerpo para sus necesidades de energía.
  • Contiene alrededor de cien billones de neuronas, también llamadas células nerviosas.
  • Cada neurona se comunica a través de mensajeros químicos con cientos de otras células nerviosas.
  • El cerebro puede contener hasta setenta trillones de memorias o recuerdos.
  • Algunos recuerdos a largo plazo y principalmente los recuerdos a corto plazo están situados en el hipocampo y en otras partes del lóbulo temporal.
  • Muchos recuerdos a largo plazo han emigrado del hipocampo para residir en el lóbulo frontal.
  • La pérdida de células nerviosas en el lóbulo temporal y en partes del lóbulo frontal, conduce a la pérdida de memoria.

Lea en Curadas el artículo previo sobre este tema, haciendo clic AQUÍ

Wikipedia

Tomado de: «La manera en que su memoria recuerda… y olvida« por: D.P. Devanand. En: Cómo potenciar su memoria de la Editorial AMAT, Barcelona -España, 2008.

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