El caso de Rodney Alcala: el «Asesino del Juego de Citas»

Alcala se conoce por su intelecto superior y su capacidad para encantar a las personas, lo que le permitía acercarse a sus víctimas

Rodney Alcala fue un notorio violador y asesino en serie estadounidense, apodado el «Asesino del Juego de Citas» (The Dating Game Killer) debido a su infame aparición como concursante en el popular programa de televisión «The Dating Game» en 1978, en medio de su serie de crímenes.

Se cree que Rodney Alcala fue responsable de un número de víctimas mucho mayor de lo que se pudo probar. Estuvo activo principalmente entre 1971 y 1979, pero sus crímenes se extendieron por varias décadas y en diferentes estados de EE. UU.

También se le vinculo con el asesinato de Pamela Lambson en 1977, aunque no fue acusado por falta de ADN.

Modus operandi y rasgos distintivos

Alcala a menudo utilizaba su pasatiempo como fotógrafo para atraer a sus víctimas, principalmente mujeres y niñas. Las secuestraba, violaba y estrangulaba, a veces llevándolas al borde de la asfixia y luego permitiéndoles recuperar la conciencia antes de volver a estrangularlas, lo que sugiere un elemento de tortura y sadismo.

Tras su arresto en 1979, la policía encontró un almacén en Seattle con más de 1.000 fotografías que Alcala había tomado de mujeres, adolescentes e incluso niños, muchas de ellas en poses eróticas o comprometedoras. La liberación pública de estas fotos en 2010 llevó a la identificación de algunas de las personas. Así que, varias de ellas son víctimas de sus crímenes no resueltos. Los investigadores han especulado que el número real de sus víctimas podría oscilar entre 50 y 130.

Rodney Alcala era un maestro en la manipulación legal, presentando numerosas apelaciones y representando a veces a sí mismo en los juicios, lo que provocó años de retrasos y frustración para las familias de las víctimas. Lo condenaron a muerte en California varias veces a lo largo de los años. En 2013, se declaró culpable de los dos asesinatos de Nueva York, lo que le valió una condena adicional de 25 años a cadena perpetua.

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