Es conocida como «La Jabonera de Correggio» por la forma en que dispuso de los cuerpos de sus víctimas
El caso de Leonarda Cianciulli es uno de los más macabros y singulares en la historia criminal de Italia.
Leonarda Vincenza Giuseppa Cianciulli (1894–1970) fue una asesina en serie italiana que cometió sus crímenes entre 1939 y 1940 en Correggio, en el norte de Italia.
El Motivo: La Madre Obesiva
El móvil detrás de sus asesinatos era una obsesión extrema por proteger a su hijo favorito, Giuseppe, de ser enviado a la guerra, que en ese momento era la Segunda Guerra Mundial.
Cianciulli afirmó haber tenido una vida llena de tragedias y pérdidas, incluyendo haber quedado embarazada 17 veces y haber perdido a muchos de sus hijos en abortos o a una edad temprana. Así, convencida de que una maldición o fuerzas malignas amenazaban a su familia, Leonarda creía que debía ofrecer sacrificios humanos para garantizar la seguridad de Giuseppe.
Las Víctimas y el Engaño
Cianciulli se ganó la reputación de ser una mujer amable y de confianza. A menudo consultada por sus vecinos para temas de adivinación o para ayudarles a conseguir empleo o pareja. Así, esta confianza fue la herramienta que usó para atraer a sus tres víctimas. Todas eran mujeres de mediana edad que estaban solas y tenían ahorros significativos:
- Faustina Setti: Una solterona que acudió a Cianciulli en busca de ayuda para encontrar un marido.
- Francesca Soavi: Una mujer que buscaba trabajo.
- Virginia Cacioppo: Una ex cantante de ópera que buscaba empleo como secretaria.
A cada una, Cianciulli le prometía una nueva vida en una ciudad lejana, persuadiéndolas de que escribieran cartas a sus conocidos para justificar su futura desaparición.
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