Prometeo – por Rodolfo Izaguirre
Es cierto que al cumplir noventa y tres años estoy volviendo a vivir, es decir, que estoy naciendo nuevamente porque he alcanzado la gloria de mantener una mente lúcida y abierta
Es cierto que al cumplir noventa y tres años estoy volviendo a vivir, es decir, que estoy naciendo nuevamente porque he alcanzado la gloria de mantener una mente lúcida y abierta