Dulces criollos: un viaje al corazón de Venezuela
La dulcería criolla venezolana es mucho más que un simple conjunto de postres. En general, es un reflejo de la rica historia del país, una fusión de influencias indígenas, europeas … Leer más
La dulcería criolla venezolana es mucho más que un simple conjunto de postres. En general, es un reflejo de la rica historia del país, una fusión de influencias indígenas, europeas … Leer más
El Monte Roraima se alza majestuosamente como el punto más alto de la cadena de tepuyes de la Sierra de Pacaraima. Está ubicado justo en la frontera entre Venezuela y … Leer más
La creencia de que el martes 13 trae mala suerte ha permeado el folclore y las costumbres, generando una serie de precauciones y dichos populares que buscan evitar la adversidad … Leer más
¡Seguimos siendo el cazador que fuimos en los mismos valles que conocieron los animales de la prehistoria y nuestra presa mas codiciada continua siendo la mujer.
El Dandismo Negro va más allá de una simple elección de moda, convirtiéndose en una declaración política de dignidad, resistencia, orgullo y poder creativo El Dandismo Negro es un movimiento … Leer más
¡Seguimos siendo el cazador que fuimos en los mismos valles que conocieron los animales de la prehistoria y nuestra presa mas codiciada continua siendo la mujer.
Quasimodo, la deforme y jorobada creación de un brillante escritor y dramaturgo francés, escapó de las páginas de una novela que durante siglos lo torturó con su trágico desenlace para, por venganza o justicia, atravesar el portal de la ficción y presenciar como en la ciudad de París, su ciudad, ardía la Catedral de Notre Dame, testigo silencioso de su frustrado y trágico amor.
«La otra noche dijiste que…!» comenzó a decir uno del grupo y mi amigo lo atajó: «¿tenía tragos?» Si, le respondieron. «Tenías varios tragos encima». «¡Entonces no lo dije!», contestó mi amigo zanjando la situación.
«La otra noche dijiste que…!» comenzó a decir uno del grupo y mi amigo lo atajó: «¿tenía tragos?» Si, le respondieron. «Tenías varios tragos encima». «¡Entonces no lo dije!», contestó mi amigo zanjando la situación.
Desde barrios, hasta pueblos o ciudades enteras, hay tantos lugares hermosamente pintados de colores en el mundo que da gusto mostrar algunos, pero desazón dejar por fuera otros.
«La otra noche dijiste que…!» comenzó a decir uno del grupo y mi amigo lo atajó: «¿tenía tragos?» Si, le respondieron. «Tenías varios tragos encima». «¡Entonces no lo dije!», contestó mi amigo zanjando la situación.
Esto que me ha pasado es vergonzosamente increíble. Las pocas personas que lo saben me aconsejaron que me quede callado para evitar el desprestigio, la burla y la crítica.
Esto que me ha pasado es vergonzosamente increíble. Las pocas personas que lo saben me aconsejaron que me quede callado para evitar el desprestigio, la burla y la crítica.
«La otra noche dijiste que…!» comenzó a decir uno del grupo y mi amigo lo atajó: «¿tenía tragos?» Si, le respondieron. «Tenías varios tragos encima». «¡Entonces no lo dije!», contestó mi amigo zanjando la situación.
En Los Palos Grandes está una de las obras más icónicas de la arquitectura de los años 50: la Quinta Alto Claro del arquitecto Richard Neutra.
Participé emocionado en la serie de entrevistas que hizo Sergio Curiel para rendir homenaje a Jacobo Penzo (Carora 1949- Caracas 2020), cineasta, escritor, pintor y autor de importante obra cinematográfica y recordé la manera tan singular como lo conocí.
El Capitán, obligado por las leyes del mar ordenó que el Auriga con unos potentes faros encendidos girase una y otra vez iluminando las oscuras aguas en un descomunal e inútil esfuerzo por encontrar un cuerpo italiano hundido en el mar. Un barco a lo lejos hizo dramáticas señales solidarias y resultaba algo mágico e irreal aquel diálogo de blancas y potentes luces fraternizando en medio de la tragedia.
Tengo hermosos y muy viejos muebles de paleta provenientes de la casa de Manuel Lobo, el padre de Belén mi mujer y coloco la mecedora frente al gran ventanal de la sala y allí espero al amanecer cuando aparece la bella e intensa luz de Caracas y admiro el cielo limpio y azul o me entristece su enfermiza blancura cubierta de nubes y el sol detrás de ellas molesto porque no puede mostrar el poder del fuego que arde en él.
A finales del siglo XIX, Estados Unidos era una superpotencia en ciernes. Y Hawái, un pequeño estado independiente encabezado por una una reina nativa. Pero las cosas pronto iban a cambiar para siempre.
Evito caer o precipitarme en la nostalgia porque es una vieja trampa del tiempo para anclarnos en el pasado e impedir que nos escapemos de él para asentarnos brevemente en el presente y volcarnos hacia el futuro que nos espera porque somos el amor. Pero el tiempo es astuto y sagaz.