Lo que más temían los presos políticos en la sede del Sebin, en El Helicoide, sucedió: uno de ellos murió a causa de la COVID-19.
La información la dio a conocer el diputado José Manuel Olivares. «Lamentamos confirmar la muerte de Erick Echegaray de 70 años, a causa de COVID-19. Estaba preso en el Helicoide», informó el parlamentario.
Informó que «due trasladado el 4 de agosto al Hosptal Clínico Universitario (HUC) con dificultad respiratoria. Necesitaba UTI pero al no haber allí tuvo que ser trasladado al Centro Médico Maracay. Falleció en el traslado», indicó.
Debido este hecho, exigió «la liberación de todos los presos políticos. Son inocentes que están hacinados e indefensos frente a la pandemia en manos de un estado criminal. Su reclusión además, les genera condiciones médicas que los hacen más vulnerables ante esta enfermedad», aseveró.
Hizo «un llamado de acción urgente a la alta comisionada para os DD.HH de la ONU, Michelle Bachelet, y a todo el sistema Interamericano. Ya es suficiente horror que se les prive ilegítimamente de su libertad, como para que además se les condene a muerte sin atención médica».
La muerte de este preso político había sido advertida por varios diputados e incluso por el sectario general de la OEA, Luis Almagro, quien responsabilizó al régimen por la salud de todos los presos políticos.
También se han denunciado casos en los calabozos de la Dgcim.